Por Sandra Elizabeth Adarme
Coordinadora de Calidad Ambiental y Social
Colégio de Rochester
Comité Executivo
Fundación Educativa Rochester
Desde el Colegio Rochester y la Fundación Educativa Rochester, es un orgullo compartir con la comunidad rochesteriana que el pasado jueves, 20 de febrero de 2025, iniciamos con alegría la primera entrega de mercados del año 2025 del programa Pan Compartido, beneficiando a 23 niños del programa Inglés para Chía y a 7 colaboradores del Colegio Rochester seleccionados cada mes por el Área de Bienestar al Personal. Esta actividad, que busca brindar apoyo alimentario a niños y familias en situación de vulnerabilidad, fue posible gracias a la generosidad de la comunidad del Colegio Rochester (padres de familia y colaboradores), quienes realizaron donaciones de productos esenciales no perecederos para hacer realidad este gesto de solidaridad.
Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a cada donante, pues su apoyo no solo nutre cuerpos, sino que también fortalece corazones y siembra esperanza en niños y familias con necesidades. Gracias a ustedes, seguimos construyendo una comunidad más unida y comprometida con el bienestar de quienes más lo necesitan.
Con cada entrega de Pan Compartido, reafirmamos el poder de la solidaridad y el impacto positivo que podemos generar cuando trabajamos juntos. ¡Sigamos compartiendo y sumando esfuerzos cada mes para que este 2025 sea un año de más oportunidades y sonrisas para todos!
En el Colegio Rochester y en la Fundación Educativa Rochester, creemos firmemente que la educación no solo se transmite en las aulas, sino también en el ejemplo de solidaridad y compromiso que ofrecemos a la comunidad. Uno de los programas más significativos en este sentido es el Programa Pan Compartido, una iniciativa que ha demostrado el poder transformador de la colaboración entre estudiantes, padres y personal educativo.
Este proyecto, que nació con el propósito de brindar apoyo a las familias más vulnerables de nuestra comunidad, se ha convertido en un verdadero símbolo de la fuerza de la unión. Gracias al compromiso y generosidad de los padres de familia y de todos los miembros del Colegio y la Fundación Educativa Rochester, hemos logrado hacer una diferencia tangible en la vida de aquellos que atraviesan dificultades económicas. Cada donación, cada gesto de apoyo, no solo ha permitido ofrecer alimentos, sino que también ha sembrado un mensaje claro de que, juntos, podemos construir un futuro más justo y equitativo para todos.
Alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS):
El Programa de Pan Compartido no solo tiene un impacto directo en la comunidad escolar, sino que también está alineado con varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) propuestos por la ONU. En este sentido, en el Colegio Rochester y en la Fundación Educativa Rochester no solo se fomenta la solidaridad local, sino que también se contribuye a lograr un esfuerzo global por mejorar las condiciones de vida de los más necesitados.
ODS 1: Fin de la Pobreza: El programa responde directamente a la necesidad de brindar apoyo a las familias más vulnerables, aliviando los efectos de la pobreza y asegurando que todos tengan acceso a alimentos esenciales.
ODS 2: Hambre Cero: Gracias a las donaciones, el programa contribuye a la lucha contra el hambre, proporcionando alimentos a quienes más lo necesitan en momentos de escasez.
ODS 10: Reducción de las Desigualdades: Al apoyar a las familias en situación de vulnerabilidad, el programa trabaja para reducir las desigualdades dentro de nuestra comunidad, ofreciendo oportunidades para todos, sin importar sus circunstancias económicas.
ODS 17: Alianzas para lograr los Objetivos: El éxito de este programa se basa en las alianzas entre el Colegio Rochester, la Fundación Educativa Rochester, los padres de familia, los estudiantes, los colaboradores y la Institución Educativa Oficial Fonquetá, demostrando que la colaboración es clave para alcanzar metas más grandes.
El Legado de la Solidaridad: Es en el Dar que Recibimos
El Programa Pan Compartido va más allá de un simple acto de ayuda; es una lección diaria de humanidad y empatía que cultivamos en nuestros estudiantes. A través de esta iniciativa, los alumnos del Colegio Rochester aprenden que el verdadero éxito no solo se mide por los logros personales, sino también por la capacidad de contribuir al bienestar común.
Los estudiantes se convierten en testigos de primera mano de cómo una comunidad unida puede hacer frente a los desafíos, y esta experiencia forma parte fundamental de su educación integral. Los valores de solidaridad y responsabilidad social que desarrollan en este tipo de proyectos son los que los acompañarán toda la vida, preparándolos para ser ciudadanos globales comprometidos con la construcción de un mundo más justo y sostenible.
¡Gracias por Su Apoyo!
Finalmente, queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a los padres de familia y a los colaboradores del Colegio Rochester, quienes han sido pilares fundamentales del éxito de este programa. Gracias a su generosidad y dedicación, el Programa Pan Compartido continúa creciendo, alcanzando a más familias y marcando una diferencia en nuestra comunidad. Sin su apoyo, este proyecto no habría sido posible.
Este esfuerzo conjunto es una verdadera muestra de lo que significa ser parte de la comunidad del Colegio Rochester: una comunidad que cree en el poder de la educación y la solidaridad para transformar vidas y contribuir al bien común.
¡Gracias padres de familia y colaboradores por su apoyo incondicional y por ser parte activa de este hermoso proyecto de solidaridad! Juntos seguimos construyendo un futuro más justo y lleno de esperanza. Disfruta de la Entrega de Pan Compartido en febrero de 2025 en el video a continuación:
United in Solidarity: We started Shared Bread Year 2025 – Impact on the Rochester School Community and on 23 vulnerable families of Chia
By Sandra Elizabeth Adarme
Environmental and Social Quality Coordinator
Rochester School
Executive Committee
Rochester Educational Foundation
Rochester School and the Rochester Educational Foundation are proud to share with the Rochester community that last Thursday, February 20, 2025, we joyfully started the first delivery of food products of the Shared Bread program - Year 2025, benefiting 23 children of the English for Chia program and 7 collaborators of Rochester School selected each month by the Personnel Wellness Area. This activity, which seeks to provide food support to children and families in vulnerable situations, was possible thanks to the generosity of the Rochester School community (parents and employees), who donated essential non-perishable products to make this gesture of solidarity a reality.
We would like to express our most sincere thanks to each donor, because your support not only nourishes bodies, but also strengthens hearts and sows hope in children and families in need. Thanks to you, we continue to build a community that is more united and committed to the well-being of those who need it most.
With each delivery of Shared Bread, we reaffirm the power of solidarity and the positive impact we can generate when we work together. Let's continue sharing and adding efforts every month so that this 2025 will be a year of more opportunities and smiles for all!
At Rochester School and at the Rochester Educational Foundation, we firmly believe that education is not only transmitted in the classroom, but also in the example of solidarity and commitment that we offer to the community. One of the most significant programs of this kind is the Shared Bread Program, an initiative that has demonstrated the transformative power of collaboration between students, parents and educational staff.
This project, which was born with the aim of providing support to the most vulnerable families in our community, has become a true symbol of the strength of unity. Thanks to the joint efforts of the Rochester Educational Foundation and the commitment and generosity of parents and collaborators of the Rochester School community, we have been able to make a tangible difference in the lives of those who are experiencing economic difficulties. Each donation, each gesture of support, has not only provided food, but has also sent a clear message that, together, we can build a more just and equitable future for all.
Alignment with the Sustainable Development Goals (SDGs):
The Shared Bread Program not only has a direct impact on the school community, but is also aligned with several of the Sustainable Development Goals (SDGs) proposed by the UN. In this sense, Rochester School and the Rochester Educational Foundation not only promote local solidarity, but also contribute to a global effort to improve the living conditions of those most in need.
SDG 1: No Poverty:
The program responds directly to the need to provide support to the most vulnerable families, alleviating the effects of poverty and ensuring that everyone has access to essential food.
SDG 2: Zero Hunger:
Thanks to donations, the program contributes to the fight against hunger by providing food to those who need it most in times of scarcity.
SDG 10: Reduced Inequalities:
By supporting families in vulnerable situations, the program works to reduce inequalities within our community, offering opportunities for all, regardless of their economic circumstances.
SDG 17: Partnerships for the Goals:
The success of this program is based on the alliances between Rochester School, the Rochester Educational Foundation, parents, students, collaborators and the Fonquetá Official Educational Institution, demonstrating that collaboration is key to achieving greater goals.
The Legacy of Solidarity: It is in Giving that We Receive
The Shared Bread Program goes beyond a simple act of helping; it is a daily lesson in humanity and empathy that we cultivate in our students. Through this initiative, Rochester School students learn that true success is not only measured by personal achievement, but also by the ability to contribute to the common good.
Students become first-hand witnesses of how a united community can meet challenges, and this experience forms a fundamental part of their integral education. The values of solidarity and social responsibility that they develop in this type of project are those that will accompany them throughout their lives, preparing them to be global citizens committed to building a more equitable and sustainable world.
Thank You for Your Support!
Finally, we would like to express our sincere thanks to the parents and collaborators of Rochester School, who have been fundamental pillars of the success of this program. Thanks to your generosity and dedication, the Shared Bread Program continues to grow, reaching more families and making a difference in our community. Without their support, this project would not have been possible.
This joint effort is a true demonstration of what it means to be part of the Rochester School community: a community that believes in the power of education and solidarity to transform lives and contribute to the common good.
Thank you parents and collaborators for your unconditional support and for being an active part of this beautiful project of solidarity! Together we continue to build a more equitable and hopeful future.
Enjoy the Shared Bread Delivery of february 2025 in the following video:
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